Hay que decir que si nuestra pasión (Universitario de deportes) nos mueve a la ovasión, no podemos admitir ni resistír la mediocridad. Universitario de Deportes clasificó a los octavos de la Copa Libertadores, pero con mérito mentiroso porque dependió de resultados posteriores: goleadas, empates o derrotas agenas y rogando a los santos que argentinos, ecuatorianos o uruguayos le den "una manito".
A pesar de que nuestro corazón crema con sangre granate se mate el alma cuando el gol hace gala en redes foráneas, nos regodeamos en un orgásmico grito: Gol. Pero debemos ser objetivos, frenar nuestro grito de guerra y abrir los ojos para denunciar a los asesinos del resultado crema. No entendemos por qué la "U" no luce un juego más ofensivo, que inspire respeto, que sea efectivo con el gol -porque con eso se gana, con goles- lo cual falta y ello se necesita con urgencia para el duelo con Sao Paulo.
Los brasileños no perdonan. Nosotros perdonamos hasta la cachetada a mamá, por decirlo menos. El juego de la "U" es cuadrado. Es disciplinado, hay que decirlo, pero comparándolo con Alianza Lima, importa un cacho que seamos el menos batido, ellos clasificaron sin apuro, sin sufrimiento, sin esperar resultados ajenos. Ganaron cuando debieron (al margen la derrota contra Aurich en Chiclayo) y eso es de reconocer. Sus goles son notables, lo que la "U" no tiene, sus victorias son contundentes, lo que la "U" no ha tenido.
El equipo de memoria...
Seamos justos, no "hinchas", porque eso sería ser estúpido, porque tenemos escrúpulos, no tripas, chúpate eso Leguía, la materia gris nos revela que falta el factor gol. Vayamos por partes. El arco puede estar tranquilo, porque tenemos a dos grandes cuidando las redes: Raúl Fernández: gran arquero, que por hoy no está para selección, sino para clubes. Comete errores infantiles que, en un club, por su regularidad, se lo perdonamos. Luis Llontop, un muro con condiciones que lo demostró ante la flaqueza de "Paco" Bazán en el clásico del 2009.
Los defensores son llamados a destacar, por lo que este equipo es caracterizado (y lo demuestra con números) por ser defensivo aplicado, retomo con lo anterior, los defensores:
"Negro" Galván; el capitán. No se nos ocurre tan rápido que esta palabra al mencionarlo. Nadie le gana arriba cuando está en el campo e impone condiciones como nadie. Es tan bueno que puede provocar un cuadro crónico de "Galvandependencia" algún día. Es uno de los pocos a los cuales, puede tener un partido fatal y se le perdona como si nada.
Galliquio; aprendió a no ser tan burro como recordamos. Cometía penales, perdía pelotas en sus famosas proyecciones, etc. Idóneo compañero del argentino. No puede faltar. Revoredo; qué podemos decir de él... Que es un lateral o central con fuerza, pero si no está, nos tiene sin cuidado, bueno, siendo buenos, no nos imaginamos un equipo sin él porque siempre es titular ¿no? Rabanal; central o más lateral que otra cosa, si se quiere decir así. Por las bandas debería imponer su altura y su delgado físico, pero, centra mal, corre y no marca, pero si marca se la quitan después.
Carmona; el hombre fuerte de la "U", que puede servir de lateral o de ofensivo por la izquierda. El tanque que desborda y con los centros, a veces venenosos, hace sudar a los defensores del rival, aunque le falta un poquito más de tranquilidad, sin contar que a veces puede ser más bestia que un "toro", por el físico y por lo que ello también implica (jajaja) nomás recordemos su partido con Lanús en Argentina, que se cansó de dar pases atrás en lugar de rematar a arco.
Manos al "Volante"
Lo mejorcito de la "U". El abanderado en estos lares del círulo central, el ex rimense más querido por la hinchada crema y nacional: Rainer Torres; el motorcito de Universitario, quien demuestra en cada pelota recuperada, peleada, dividida que, como un hicncha confeso sumado en esfuerzo pelea con los rivales más pintados, otra a ser llamado el capitán de la defensa en primera línea. "Toñito" Gonzales; lucha en el medio, con menos tamaño y un carácter peor que el diablo (ojo con las rojas) demuestra ser un tapón, o por lo menos un difícil "hongo" en el campo, que cuesta psarlo ileso, aunque a veces termine perdiendo la bola por su falta de físico ante el rival.
Hagámos hígado un rato. Piero Alva; el resistido por la hinchada. Con justa razón, porque el señor es irregular. Define cuando nadie lo piensa, en cada diez partidos, cuando nadie piensa en él, cuando debe, no lo hace. Frente del arco, el hombre prefiere regalar pelotas a la popular Norte o Sur. Habrá hecho un golazo en el play off en Matute pero, de ahí, nada, nada, nada. Por eso la hinchada jamás lo va a querer. Luis Ramirez; lo trajeron para qué. Reynoso no se cansa de ser a veces, tan bestia. No hace nada, el hombre no es ni creativo, lo será cuando lo demuestre, al "cacho" que sea habilidoso, mágico, sencible y todo lo que Quiroga diga cuando es comentarista, si en la cancha no hace nada más que impresiciones.
Johan Vasquez; volante ofensivo sin juego, lento, intrascendente, debe ser bueno en el torneo local, internacionalmente hace poco o nada quién sabe. No es bueno ni malo, sólo que está allí por un dos por uno: Ramirez y Vasquez que llegaron el 2008 y se quedaron por el corazoncito tacneño de Reynoso. Rodolfo Espinoza; se escucha que es técnico, hábil, cerebro,... nada señores. Con el mexicano no se sabe, debe ser dependiendo cómo se levante en la mañana supongo. Centra mal, sus disparos de media distancia son una lágrima, cuando quiere jugar en una... mejor dejémoslo ahí.
Hablemos del factor gol en: "Adelante hay sitio"
La "U" no tiene gol. Desde Johan Fano en el 2007, desde los goles de Neyra, Hurtado, Candelo en el 2008, desde Labarthe en el 2009 antes de su lesión, éste equipo no tiene un goleador fijo, pero vamos por partes, otra vez...
Gianfranco Labarthe; el llamado a revivir la llama del gol después de ser el goleador con 12 tantos (más de la mitad de cabeza), no aparece más, ya sea por continuidad o porque no se alumbra. Tiene corazón para estar allí y con cabeza es letal, pero no sabe jugar con los pies, cuando tiene para definir, patea mal o le gana el defensor, lo cual llena de impotencia al hincha. Carlos Orejuela; el campeonato pasado anotó 5 goles. Se fue al Chalaco por no tener oportunidad de juego, pero en esta campaña, apareció una vez contra Blooming en Bolivia por la Copa, pero, después, nada, es decir, con la fuerza, el empuje y las ganas, no son contados como goles pues.
El paquete, el Calheira de este año: Victor Piriz Alves; sólo Reynoso puede ser capáz de traer gente intrascendente al equipo. El llamado a ser el goleador, el "9", es el "27" del plantel (¿no es más que obvio?) quien nadie sabe de él y que, tiene piernas de abuelo (por su debilidad en los huesos que mostró a principio de año) que anota goles de penal y de off side. Nada que ver. "La Pulga" Ruidíaz; es la más grata aparición del fútbol peruano en delanteros a futuro. Demostró que no le pesa la camiseta y como delantero vale más que Alva, Alves, Orejuela, etc. Con goles se ha ganado el cariño de la hinchada, nomás pregúntenle a sus víctimas: Damián Rodriguez, Juan Flores (dos veces), Jhonny Vegas (dos veces) quines son trofeos de sus únicas 5 conquistas en su carrera en primera división.
No olvidemos a otros obreros que se ganan el aplauso del hicncha: Miguel Torres, el pulmón de la "U" y Llontop, quien es digno suplente y titular. Y no se salvan, para terminar este mea culpa, el paquetes que, el brillante técnico de la "U" pidió: El resistido y odiado Adrián Zela, que no es precisamente el mejor back, pero es torpe el pobre, su mala suerte nos ciega (autogol y pérdida de balón). Joyce Conde, delantero intrascendente y sin peso, su altura no le sirve de nada. El plantel de el equipo más ganador del Perú, también tiene sus defectos.